No es clickbait (o tal vez sí), pero si todavía no conoces el maravilloso mecanismo llamado “Compra de cartera” hoy venimos al rescate de tu billetera.
¿Eso cómo se come? Fácil.
Se trata de un proceso donde una entidad financiera, por lo general un banco, te compra las deudas que tengas con otras entidades, pero con una tasa de interés más bajita y con cuotas más cómodas de pagar.
Supongamos que una persona tiene deudas regadas en varias partes y paga $100 en total sumando el valor de las diferentes cuotas mensuales. Con una compra de cartera podría consolidar todo en una sola gran deuda y pagar $50 o menos al mes, dependiendo de los términos que pacte con la entidad que compró sus deudas.
También beneficia a quien esté pagando deudas con intereses altos. Por lo general las compras de cartera ofrecen tasas de interés más bajas, lo que se traduce en un ahorro mensual importante.